“Lo que es bueno para los mercados, no necesariamente lo es para la gente”
El economista Juan Esteban Jacobo recibió su título como doctor en Economía de New School, con una tesis que retoma a los economistas clásicos.
El profesor de Macroeconomía II, Macroeconomía Bayesiana y Métodos Cuantitativos en la Facultad de Economía, Juan Esteban Jacobo, alcanzó un nuevo peldaño en su formación académica al recibir su título de doctor en Economía de New School, Universidad de Nueva York.
El tema de su tesis fue el mismo que eligió desde su pregrado, cuando durante sus clases con el profesor Homero Cuevas, descubrió su pasión por la historia económica y la aplicación de las teorías de los autores clásicos.
Precisamente su tesis “Ensayos sobre el modelo estadístico de la macrodinámica clásica”, obtuvo el premio a la mejor tesis de estudiantes de doctorado Edith H. Jhonson memorial award in economics, civil affairs, and education.
¿Qué aborda la tesis?
La tesis emplea modelos estadísticos para poner a prueba las teorías de los economistas clásicos: Smith, Ricardo y Marx. Pretende ver cómo estas teorías sirven para describir la dinámica de las variables macro en Estados Unidos.
Las ideas básicas de los economistas clásicos se enmarcan en una visión del capitalismo donde se produce para tener ganancias, no para tener un placer para el consumo. Esto le exige a la teoría explicar de dónde salen esas ganancias y mi idea era ver si esa teoría de qué hace que las ganancias suban o bajen durante el tiempo, se ven reflejadas en los datos en Estados Unidos.
¿Cómo lo explica en su trabajo?
Construí un modelo de los economistas clásicos, con variables reales y monetarias, es decir el crecimiento, las tasas de ganancia, el desempleo, los intereses, la cantidad de dinero, y el nivel de precios, para ver si la teoría de los economistas clásicos describe bien lo que pasa en este país norteamericano desde 1960.
Lo que demuestra es que la tasa de ganancia es la principal variable para describir lo que pasa con el desempleo y el crecimiento, que la tasa de ganancia depende del desempleo y de la proporción de los salarios sobre el ingreso, lo que evidencia la tasa de la plusvalía de la que hablaba Marx.
¿Podría tener aplicación en Colombia?
Sí, el problema es que en Colombia no hay datos de las ganancias y eso de cierta forma muestra cuál es la tendencia teórica que hay entre los economistas que hacen política pública en Colombia. Si no están mirando las ganancias, están respaldando su teoría por el lado neoclásico o postkeynesiano.
¿Esas visiones podrían influir en la toma de decisiones?
Sí porque una de las cosas que quedan claras con el enfoque clásico es que no necesariamente lo que es bueno para los mercados es bueno para la gente. Una de las formas para hacer que las ganancias de un país suban, es hacer que las condiciones de trabajo sean peores o hacer que el poder de negociación de los trabajadores sea más bajo. Si las ganancias suben, el crecimiento sube y la inversión también.
Todo termina siendo un resultado positivo para los mercados, pero no necesariamente el origen fue bueno porque pudo haber representado la eliminación de la pensión o la salud de la gente. Terminan siendo bueno para los mercados, en el sentido de que el crecimiento es más alto, pero no para la gente.
¿Por qué eligió este tema?
Desde mi clase con Homero Cuevas en tercer semestre de pregrado para mí siempre fue claro que yo iba a trabajar en este tipo de cosas, de la línea de historia económica. Al principio podría decirse que es un tema que no sirve de nada en términos prácticos, pero precisamente en mi tesis quise demostrar que sí sirve y que permite tener una visión de cómo funciona el mundo.
¿Por qué cree que es una línea poco abordada?
Mi posición crítica es que en la formación de los economistas, hay una facilidad por hacer lo que todo el mundo hace y es muy conveniente hacer lo que todos hacen. Si me quedo con las enseñanzas de quien se forma con neoclásicos, nunca entraría en conflicto con otras corrientes y siempre encontraremos el gobierno o los mercados la responsabilidad de todos los problemas. Cuando se toma un camino crítico, no hay una única ruta para seguir. Creo que no es un problema de la formación de las universidades sino de los estudiantes mismos.
¿Qué invitación les haría a los estudiantes de esta carrera?
Mi invitación es a que sean críticos, que en economía a diferencia de las ciencias naturales, no hay un conocimiento que se pueda tomar como “único e indiscutible”. Es muy probable que lo que le enseñan a uno esté mal y la mejor forma de darse cuenta es saliendo de esa línea, estudiando las críticas a las distintas teorías y analizarlas en contexto. No se queden solamente con el texto guía de sus clases, lean los autores y sean críticos.