“Hay que desbloquear la democracia en Colombia”
El profesor emérito y docente investigador de nuestra Casa de Estudios, Alfonso Gómez Méndez, presentó su libro ‘Democracia Bloqueada’ en el Gimnasio Moderno de Bogotá. Un evento al que asistieron importantes personalidades del mundo político y jurídico del país.
Alfonso no necesita presentación. En sus más de 50 años de carrera jurídica ha sido uno de los pocos colombianos que ha ocupado los cargos de procurador, fiscal, ministro, congresista, embajador y juez. Nació en Chaparral, Tolima, y siempre se ha sentido orgulloso de su origen humilde.
Llegó a Bogotá con el sueño de ser docente y estudiar Derecho. Su paisano y profesor, Alfonso Reyes Echandía, fue crucial en este sueño pues, de acuerdo con las propias palabras de Gómez Méndez: “lo trató como a un hijo”. Por esto, no es una mera casualidad que le doliera tanto su muerte en la retoma del Palacio de Justicia en 1985 y que sea uno de los personajes que más nombra en su libro que también incluye a figuras como Alfonso López y hasta a Helenita Vargas.
Este texto, que recopila algunas de sus columnas, perfiles y entrevistas en las que defiende el Estado de Derecho en Colombia, fue presentado en el Gimnasio Moderno de Bogotá con la asistencia de más de 200 personas entre las que se encontraban nuestro rector, Hernando Parra Nieto, además de jueces, magistradas(os), alcaldes, gobernadores, ministros y docentes de nuestra Casa de Estudios.
“Este libro es varios libros a la vez, es un libro de historia personal, de historia de Colombia y es una autobiografía. Algo muy interesante”, dijo Roberto Pombo durante la presentación y antes de dirigir la conversación a una serie de anécdotas contadas por Gómez Méndez donde los recuerdos de la casa donde vivía con su familia, sus primeros pasos como juez, su posterior carrera política y su labor como fiscal y ministro permanecen intactos.
Aunque el título del libro sugiere que hay un bloqueo completo de la clase política, para su autor este fenómeno no es completo, sino que se puede dividir en tres partes:
El primer bloqueo tiene que ver con la estructura social del país, porque esta es la que hace que amplios sectores de la población estén al margen de todo, porque no solo es hacer elecciones sino cumplir con programas y proyectos destinados a las poblaciones.
El segundo es que tenemos un sistema presidencial asfixiante porque por la vía del clientelismo el presidente maneja el congreso. “También maneja las fuerzas armadas, puede romper relaciones internacionales vía micrófonos, puede controlar, por medio de las superintendencias todas las actividades y, a través de ellas, hay un pseudo control que depende de la presidencia”, dijo.
El tercer bloqueo es la falta de responsabilidad política porque hace que no hayan salidas como, por ejemplo, la forma de juzgar al presidente. “Creo que este país tiene que desbloquear la democracia, no acabarla”, concluyó.
Desde la Universidad Externado nos sentimos muy orgullosos de la publicación de este texto que no solo refleja el compromiso de nuestro docente externadista con la reflexión crítica y la defensa de las instituciones democráticas en Colombia.