Anfitrión: ¿Cómo deleitar a sus comensales?
No se trata de tener una lista de chequeo para ser un buen anfitrión, pero sí de aplicar el talento, las aptitudes y los conocimientos, junto con la amabilidad y la buena disposición de quien recibe en su casa, en el restaurante, el club o en el hotel.
Recomendaciones
1. Conocer de antemano el tipo recepción que desea ofrecer, y sus pormenores.
2. Comprender y aplicar el protocolo y las reglas de etiqueta a seguir.
3. Elaborar una lista completa de sus invitados y enviar la copia definitiva al encargado del establecimiento donde se realizará el evento.
4. Cursar las invitaciones con la debida antelación; sobre y tarjeta se diligenciarán con sumo cuidado, colocando nombres y apellidos completos y cargo del invitado en cuestión. Las omisiones o errores, por involuntarios que sean, causarán rechazo y malas interpretaciones.
5. Procurar la seguridad de sus invitados, ordenar y coordinar los aspectos pertinentes, así como las facilidades de parqueo.
6. En el ámbito familiar, cuando se lleva a cabo un matrimonio, por ejemplo, algunas veces se facilita el alojamiento a familiares cercanos; si no se tiene el espacio correspondiente se han de proveer los medios para conseguirlo, si el invitado especial o invitados provienen de otras ciudades o países. Se le puede ayudar en lo concerniente a la Internet, al Wifi, el celular, los tiquetes aéreos, una copia de la agenda con fechas, hora y lugares de todos los eventos y, además, el código de vestido de cada uno.
7. En el ámbito empresarial, se ha de proporcionar el alojamiento o los medios para conseguirlo, si el invitado especial o invitados provienen de otras ciudades o países; ayudarles en lo concerniente a comunicaciones, tiquetes, datos sobre otros invitados y sus cargos en las empresas o entidades que representen, agenda de todos los actos a celebrar y trajes a usar.
8. Planificar servicios médicos de emergencias y de ambulancias en caso de ser necesarios.
9. No se trata tan solo de dinero, se trata de administrar los recursos, se requiere elaborar presupuestos, aplicar el sentido común y estar dispuesto a ofrecer momentos de grata recordación a sus invitados.
Todo esto podremos aplicarlo cuando retornemos a la normalidad que, de cualquier manera, no será igual al concepto que teníamos de lo normal, antes de la pandemia del Covid 19.
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