El trabajo social es un pilar fundamental para mejorar la calidad de vida
En el marco de la celebración del Día del Trabajo Social, se realizó el conversatorio: ‘El rol del trabajo social: de la política pública de los cuidados y los derechos’, donde expertas en el campo abordaron los desafíos actuales y las oportunidades para fortalecer el bienestar social y los derechos humanos en la vejez.
Este encuentro reconoció la labor de las(os) profesionales de trabajo social, quienes día a día dedican su esfuerzo a construir una sociedad más equitativa, justa y solidaria. Este es un momento clave para reflexionar sobre el envejecimiento de la población y el papel que tenemos desde la academia para garantizar el bienestar de las personas mayores.
El programa de Trabajo Social fue el primer programa que se lanzó desde la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas. “Hablar de trabajo social es hablar de la historia de nuestra universidad y de nuestra Facultad. Quiero renovar mi reconocimiento y agradecimiento a la comunidad externadista por la devoción, entrega y dedicación de las(os) funcionarias(os), docentes y también a nuestras(os) egresadas(os) por el orgullo con el que llevan el estandarte externadista”, señaló el rector Hernando Parra Nieto, al brindar un grato saludo en este espacio.
La Política Colombiana de Envejecimiento Humano y Vejez destaca un significativo aumento en la población adulta mayor. En 2010, el número de personas de 60 años o más era de 4.473.447, y para 2014 esta cifra ascendió a 5.146.251, representando el 11% de la población total. Este proceso de envejecimiento avanza rápidamente, ya que se estima que, en solo 20 años, de 2017 a 2037, la proporción de personas mayores de 65 años en Colombia pasará del 7% al 15%.
Por esto, desde la Facultad se considera importante trabajar en torno a las políticas públicas relacionadas con la vejez y establecer estrategias que permitan mejorar las condiciones de vida, para que los adultos mayores sean visibilizados y cuenten con cuidados dignos.
“El grupo de adultos mayores ha crecido de manera evidente y requiere de una disciplina como la nuestra, el trabajo social. Las(os) invito a que este sea el preámbulo para empezar a trabajar y a pensar cómo podemos aportar desde la academia, como educadoras(es), estudiantes e investigadoras(es), en esta necesidad y cuestión social que tenemos tan latente y cercana a nosotros: la atención, el cuidado y el empoderamiento de los adultos mayores”, señaló Merly Maritza Díaz, directora del programa.
Durante el conversatorio, se consideró importante que los jóvenes no piensen solo en los adultos mayores, sino en su propia vida, para que, en un futuro, sean ellos quienes disfruten de esa lucha.
Las expertas María Ramírez, consejera en representación de la población mayor; Diana Cobaleda, experta en la prestación de servicios con enfoque biopsicosocial para personas adultas mayores; Aura Márquez, integrante del grupo interdisciplinario de estudios sobre envejecimiento de la Universidad Nacional; Gladys Guzmán, autora del modelo de atención integral; y María Antonia Román, decana de la Escuela de Enfermería de la Universidad Juan N. Corpas, expresaron su preocupación por trabajar desde la academia y la profesión para transformar los territorios, especialmente en beneficio de los adultos mayores. Afirmaron que las condiciones de la vejez no pueden atenderse sin considerar el curso de vida de las personas, pues la vejez se construye desde la infancia, la juventud y la adultez.
«Las políticas públicas deben seguir considerando este sistema del curso de vida, y la disminución poblacional, que antes se veía como algo muy distante, ahora está aquí y ha llegado para quedarse. Nosotras(os), como trabajadoras(es) sociales, debemos seguir interviniendo en las realidades y problemas sociales, y continuar promoviendo temas de participación comunicativa, incidencia y empoderamiento de los colectivos que permitan la transformación de los territorios. Pero, especialmente, desde lo más pequeño, entendiendo cómo, desde nuestros hogares, percibimos a la persona mayor, el rol que le estamos dando y su inclusión en los diferentes escenarios», señaló Diana Cobaleda.
Para finalizar, María Ramírez invitó a las(os) estudiantes a perder el miedo a luchar por sus ideales y, en su trabajo, revisar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que deberían ser considerados en la política pública. Los instó a confrontar la institucionalidad y defender los derechos, para generar un cambio no solo para las personas mayores, sino también para las futuras generaciones, de modo que nunca más teman envejecer, sino que anhelen haber construido un futuro mejor para todas y todos.
Desde la Universidad Externado de Colombia nos enorgullece ver cómo desde este programa se asume la responsabilidad de transformar el cuidado como un derecho fundamental, al determinar que esto significa proteger, acompañar y empoderar, así como brindar la certeza a las comunidades de que sus derechos son inquebrantables y su bienestar es nuestro compromiso.