¿Cómo rescatar a la Unión Europea?
Con la participación de reconocidos panelistas internacionales, se discutió sobre la actual situación de esta comunidad y los retos a los que se enfrenta.
Obstáculos tan grandes como la presencia de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos, con su política proteccionista a ultranza, o el Brexit, se interponen en la continuidad de la Unión Europea. Sin embargo, es preciso mantener y afinar la lucha para defender la más exitosa experiencia política en la historia del mundo, protagonizada por países que habían estado en guerra durante siglos.
Este 2017 se cumplen 60 años del Tratado de Roma, firmado el 25 de marzo de 1957, el cual dio comienzo a la construcción política de lo que hoy se conoce como la Unión Europea. Este fue el tema principal del encuentro de este lunes en la Universidad Externado, en el marco de la catedra Jean Monnet, del Departamento de Derecho de los Negocios.
El principal objetivo de la Unión Europea era el de prevenir las guerras y crear una cooperación política, social y económica, en ese tiempo, entre los seis países fundadores: Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos. A 60 años de su firma, ya hacen parte de la Unión Europea 28 países.
“Durante todos estos 60 años Europa ha logrado construir más que un sistema político; es un sistema de unión. Se ha llegado a decir a través de la historia que es la experiencia más exitosa en toda la humanidad, lograda por países que estuvieron en guerra por siglos”, dijo el español Nicolás Sartorius, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Alternativas y expositor de la catedra.
Pero hoy en día este logro, apuntaron los panelistas invitados, ha pasado a un segundo plano. Los analistas culpan al euro, que se puso en circulación por primera vez en el 2001, como el causante de la crisis que azotó a varios países de la Unión Europea entre 2008 y 2009 y de la cual hasta ahora se están recuperando.
“Cuando el euro se idealizó en 1995 no se hizo con una política económica común. Nunca se consideró tener un frente ante la crisis. Y cuando menos se lo esperaron hubo una devaluación interna y externa de la moneda. Empezaron entonces a aparecer paraísos fiscales e, inevitablemente, aumentó el desempleo”, agregó Sartorius.
Esto ocasionó entonces que, en varios países europeos, especialmente en España, empezaran a ‘golpear la puerta’ el desempleo, la exclusión, la desigualdad, que dieron paso a una crisis social.
En este sentido, los panelistas internacionales coincidieron en que el Estado de bienestar fue afectado por una serie de recortes a la educación, la salud, las pensiones, los salarios y algunos gobiernos decidieron culpar a la Unión Europea por su falta de previsión de una crisis económica.
A esto también le siguió la aparición, o reivindicación, de personas con tendencias nacionalistas y la falta de solidaridad hacía los inmigrantes y refugiados, que empezaron a verse como una desventaja frente a la crisis financiera, además de una amenaza por los recientes ataques terroristas.
Pero, sumado a todo esto, y uno de los temas que causó mayor preocupación entre los invitados, entre los que se encontraban Lothar Witte, director de la fundación Friedrich Ebert Stiftung en Colombia – Fescol, Rachel Brazier de la Embajada Británica, Miloš Sklenka, embajador de Republica Checa en Colombia y Eric Tremolada, docente de la Universidad Externado y titular en Colombia de la Cátedra Jean Monnet, es el Brexit, esto es, la decisión de Gran Bretaña de salir de la Unión Europea.
“Si esto sucede sería algo muy negativo, pues en realidad Gran Bretaña nunca estuvo del todo dentro de la UE, pero es la segunda economía de Europa, además en temas de seguridad y defensa sería una pérdida enorme”, apuntaron.
Junto a esto mencionaron que el triunfo de Donald Trump tampoco aportó para la recuperación de la Unión Europea, pues su mandato es basado en una política sin tratados comerciales y a favor del proteccionismo interno: “un país que es solo para sus habitantes es una vía nefasta que solo generará guerras en el futuro”, advirtió Nicolás Sartorius.
El panorama hoy en día sigue siendo crítico; varios países miembros de la Unión Europea dudan de su permanencia en esta comunidad política; según el embajador de la Republica Checa en su país tan solo un 37% de la población está satisfecho con la permanencia en la UE.
Nicolás Sartorius, junto a los demás panelistas, advirtió que la única salida para “relanzar Europa” es la de hacer una política económica del euro, cubrir las deudas e invertir en infraestructuras europeas, seguros médicos, pensiones y salarios, además de avanzar en las uniones de políticas, seguridad, defensa y lucha antiterrorista entre los 28 miembros de esta comunidad.
“No se puede mutualizar la deuda solo para salvar los bancos: ¿para quién se está construyendo Europa?, la prioridad de la Unión Europea debe ser una y solo una: la política social”, finalizó Sartorius.