El azar como forma de participación y representación democrática
La democracia representativa sufre lo que se podría denominar una crisis de legitimidad. Por esta razón, el Departamento de Derecho Constitucional del Externado llevó a cabo un evento en el que se puso sobre la mesa la posibilidad de seleccionar a los gobernantes de manera aleatoria (sorteo) en lugar de escogerlos por medio de elecciones tradicionales.
Según explica César Vallejo, docente del Departamento de Derecho Constitucional de nuestra Casa de Estudios, “esta idea (la del azar) aunque parezca novedosa, en realidad ha sido central en la democracia desde su propio origen. Incluso hoy muchos países utilizan los mecanismos de selección aleatoria dentro de sus sistemas políticos: la Constitución de Irlanda, por ejemplo, fue elaborada por una asamblea constituyente conformada en sus dos terceras partes por personas seleccionadas al azar.
Y el resultado fue mucho mejor que el esperado. En algunos Estados de Estados Unidos también se usan con frecuencia con los llamados «mini publics», una especie de asamblea de ciudadanos seleccionados al azar para que se reúnan, deliberen y emitan recomendaciones sobre proyectos de ley o políticas públicas. En resumen, el tema no solo es necesario sino también de mucha actualidad”.
En esta misma línea, Vallejo explica que, en los últimos 20 años, la idea del sorteo como mecanismo democrático ha vuelto a tomar fuerza. En distintos países de reconocida tradición democrática se ha vuelto a implementar en experiencias como la de conformar (por medio de la selección aleatoria) asambleas constituyentes o, incluso, pequeños grupos de ciudadanos para que se pronuncien sobre temas de política local.
Felipe Rey Salamanca, doctor en Derecho de la Universitat Pompeu Fabra (España), indica que es un mecanismo que se está proponiendo en Colombia. Por ejemplo, el Concejo de Bogotá está haciendo algo diferente para el proceso de participación y discusión del Plan de Desarrollo, está escogiendo por sorteo a 250 ciudadanos para que contribuyan a su discusión.
El profesor Vallejo también subraya que la idea del azar, en tanto tiene que ver con la incertidumbre, suele generar resistencia. Por eso, una buena estrategia sería introducir mecanismos de selección aleatoria de manera paulatina, y no para que sustituyan completamente las elecciones (mediante voto) sino para que las complementen.
Podría pensarse, por ejemplo, en asambleas de ciudadanos seleccionados al azar para que estudien y conceptúen sobre los planes de desarrollo municipales. Otra forma de implementarlo de manera gradual, sería seleccionar por azar a grupos de
ciudadanos para que hagan un control político directo de la gestión de los representantes.
El evento se realizó como preámbulo de las XXI Jornadas de Derecho Constitucional.