«La reconciliación debe ser multidimensional con perspectivas incluyentes y participativas»
El Ministerio del Interior y la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales del Externado desarrollaron la ‘Semana de la Reconciliación’, como un ejercicio académico y de país, alrededor de un tema que resulta trasversal a las políticas de Estado.
A lo largo de 3 jornadas, este evento estuvo compuesto por conferencias, conversatorios, paneles temáticos y muestras artísticas, donde se realizó una aproximación minuciosa al desarrollo de la agenda de paz y reconciliación que se trazó después de la firma del acuerdo con la guerrilla de las FARC.
“La construcción de paz es constante y no se quedó en la firma de un acuerdo. Año tras año nos impone nuevos retos sociales, culturales y políticos”, sostuvo Andrea Assis, representante del Ministerio del Interior.
“El Acuerdo Final entre el Gobierno y las FARC-EP, es un aporte a largo plazo en la disminución de la violencia y en la consolidación de paz en el país. Sin embargo, el alcance de la reconciliación requiere de un escenario más amplio que implica una serie de procesos paralelos de sanación, cicatrización y de re-significación de valores “, sostuvo Carolina Isaza, coordinadora del Observatorio de Políticas, Ejecución y Resultados de la Administración Pública (OPERA).
La Semana de la Reconciliación nació del trabajo investigativo desarrollado desde el 2017 por 3 equipos de consultores del Programa ‘Capstone Intermaestrías’ de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales y el Grupo de Política de Victimas del Conflicto Armado del Ministerio del Interior.
Durante el panel: “Tejiendo la reconciliación multidimensional en Colombia: bases y retos”, los expertos explicaron la experiencia y los aprendizajes del caso colombiano en torno a la reconciliación desde una perspectiva territorial.
“La reconciliación no es un concepto efímero o utópico de alcanzar; ni es un paso que se agota en un momento exclusivo o particular del tiempo con el fin de la guerra. Esta debe ser entendida como un proceso multidimensional de largo aliento que busca reconstruir tejidos individuales”, sostuvo Germán Romero, investigador de la Universidad Externado.
La segunda jornada se centró en la importancia del seguimiento a los procesos de construcción y consolidación de la paz que aportan a los caminos de la reconciliación en el país.
“La reconciliación es un tema que a todos los colombianos nos compete, desde cualquier sector tenemos que reflexionar sobre lo que está pasando en el país, después de la firma del acuerdo y cómo se espera llegar a la construcción y consolidación de la paz”, indicó Paula Ruiz, directora de la Escuela de Relaciones Internacionales del Externado.
Con la interpretación de la canción ‘El Pescador’, del maestro José Barros, por parte de los niños de la Fundación Nacional Batuta, se inició el cierre de la Semana de la Reconciliación, poniendo a la música, como instrumento para la construcción de paz.
Esta última jornada se basó en el arte como punto focal para la reconstrucción de tejidos sociales e individuales que lleven a la reconciliación.
“Este ha sido un proceso muy difícil para Colombia, con más de 50 años de violencia; por eso debemos construir juntos, consolidar las diferentes voluntades para alcanzar el objetivo de reconciliación que tanto necesita el país”, concluyó el decano de la Facultad de Finanzas, Gobierno y relaciones Internacionales, Roberto Hinestrosa.
Por su parte, los expertos participantes señalaron que “la reconciliación se entiende como un proceso: un tejido que se hila, un camino que se transita. Esto supone una fuerza integradora de acciones colectivas que nacen desde el convencimiento individual de hilar. Extender el pensamiento sobre la reconciliación a escenarios diversos y emergentes que motiven tejidos del ‘yo’ y del ‘otro’ en el inmenso telar de posibilidades en la profundidad de nuestros territorios”.