Tertulia: Revolución rusa y su estética
El Instituto de Estudios Interdisciplinarios realizó, el pasado 18 de marzo, la tertulia “Revolución rusa y su estética”, en la que se mencionaron diferentes acontecimientos históricos como la Primera Guerra Mundial, la caída del zar de Rusia y la Revolución de Octubre, entre otros eventos históricos que protagonizaron el cine soviético y mundial.
Varios docentes del Instituto ofrecieron sus puntos de vista sobre el papel del séptimo arte en la formación de las masas del régimen surgido en 1917.
Jairo Obando afirmó que el cine argumental que se hacía en la Rusia ‘zarista’ se consideraba decadente, porque eran melodramas imitativos de las películas francesas e italianas y por eso, directores del cine soviético, como Dziga Vértov, lo consideraban un cine burgués.
Durante la tertulia se proyectó un fragmento de la obra “El hombre de la cámara” (1929), dirigida por Vértov, quien muestra todo el proceso de industrialización de la revolución rusa desde una perspectiva ideológica.
“Se veía la imagen de que la revolución no era solamente una revolución armada y política. Aquí se empieza a ver una revolución en la medida en que la gente sale de su trabajo y va a las playas, a los salones de belleza, a los cines. Muestra la incursión de las mujeres en eventos deportivos”, afirmó el docente.
El experto también contó que los artistas de la época descubrieron que, con el montaje de dos o más tomas, podían expresar conceptos más amplios, y así dar un paso cultural para enriquecer la formulación ideológica: “Porque un país forma su nacionalidad no solo con el presente, sino con lo que sucedió en el pasado y con sus aspiraciones futuras”, concluyó.
En esta misma línea, Leonardo Agudelo afirmó que los rusos convirtieron la técnica del cine en un arte, ya que demostraron que las imágenes tenían la capacidad de generar y cambiar los sentimientos de un auditorio.
Asimismo, destacó el papel que el cine jugó durante el inicio de la revolución rusa, ya que Lenin, uno de sus grandes líderes, sabía y entendía el poder del arte para sensibilizar y ‘coedificar’ la conducta humana, y por eso, durante la revolución, contó con la compañía de una gran cantidad de artistas, tanto del cine, como de la literatura y la fotografía.
Entretanto, Carlos Tapias destacó que personajes como los poetas Aleksandr Blok y Serguéi Yesenin, cobraron gran importancia en la historia de la Rusia soviética, porque tuvieron la capacidad de expresar los sentimientos de ese pueblo revolucionario que estaba naciendo.